A España llegó la versión censurada. En lugar de la desafiante portada ideada por Andy Warhol para el disco de los Rolling Stones Sticky Fingers (1971), con la pelvis masculina enfundada en unos pantalones vaqueros (“la portada de la cremallera” se decía), se colocaron unos dedos femeninos saliendo de un bote de melaza. La traducción del título del álbum es dedos pegajosos, de ahí ese alarde de diseño. Ni comparación. Pero existía otra censura que al melómano español no se le escapó: en lugar de la canción Sister Morphine aparecía Let It Rock, un rock and roll de Chuck Berry interpretado con el corajudo estilo de los Stones de Mick Taylor. Por qué este cambalache. Según los censores de Franco, porque Sister Morphine “contenía material sexual”. Hasta en eso se equivocaron.
‘Sister Morphine’: la canción por la que Marianne Faithfull batalló contra los Stones para hacer justicia
